Todos recordamos la escena en que un Sean Connery en estado de gracia interpreta
a Guillermo de Baskerville, tras introducirse secretamente en la
biblioteca de la abadía del crimen.
Comienza a
hojear libros, maravillado, entre ellos el inevitable Beato de Liébana,
auténtica inspiración de Umberto Ecco para escribir su novela, junto con
la idea de envenenar a un monje.
La atmósfera
de trabajo del Scriptorium queda perfectamente ambientada por el
director del film, Jean Jacques Annaud. Observamos que el útil principal
de escritura es la pluma de ave, que comenzó a utilizarse alrededor del
siglo VI.
Se conservan auténticas obras maestras de esta época medieval y de los
inicios de la imprenta, como vimos en repositorios de empresas
comerciales; como rarebookroom.org.
Tras la pluma de ave, surgió, ya en el XIX, la pluma de metal. En el
mismo siglo se patentó la máquina de escribir; en la que mi generación
escribió sus primeros trabajos académicos. Mi último proyecto
universitario lo redacté en un arcaico PC, eso sí consultando
bibliografía en papel, a veces con sangrientos resultados.
En la actualidad las consultas bibliográficas se pueden realizar
por internet, con gran cantidad de material digitalizado. Para
determinada documentación se requiere acceso desde los propios equipos
de bibliotecas y centros de conservación. Por ejemplo en una de las
sedes de la BNE.
Tras la pluma, la máquina de
escribir, el ordenador e Internet ha surgido una nueva herramienta
multitarea, que puede ser utilizada para investigar y escribir. Me
refiero a ChatGPT. De hecho ya existen libros en Amazon, supuestamente
escritos por la IA.
Pero, ¿Qué tal escribe? ¿Es fiable documentarse con esta IA?
Uff, lo siento, creo que me he equivocado con la foto anterior, reitero mis disculpas y prometo flagelarme con una fibra óptica. (Típico comportamiento de ChatGPT cuando mete la pata hasta el fondo).
Bien. Tras introducir una imagen más edulcorada de la IA, comienzo a responder:
Mi experiencia personal, tras unas cuantas sesiones de uso, es que tiene un buen estilo narrativo.
La primera misión que le encomendé fue escribir un microrrelato de terror.
Leer
el texto me produjo una regresión a entrañables situaciones donde
compartía improvisados cuentos de terror con amigos.
Una carretera
neblinosa a través de túneles rocosos tras una visita a la Garganta del
Cares. Un frío vivac invernal en la Pedriza. Una capilla en las orillas
de un evocador pantano o un refugio de montaña en Transilvania. Sin duda
me llevaría a ChatGPT a cualquiera de estas situaciones. Su narrativa
da bastante miedito.
También se le puede pedir
que continúe una historia, que escriba con el estilo de escritores
famosos, que escriba para distintas edades...
La
cuestión del estilo quizás sea más postureo y apariencia que otra cosa.
Según mi experiencia, ChatGPT maneja una extensa base bibliográfica,
pero dudo que le hayan facilitado muchos textos completos. Eso sí, sabe
adornar muy bien sus conocimientos superficiales sobre las obras. Esto
probablemente tenga que ver con la forma en que ha sido alimentado.
Dieta de ChatGPT:
ChatGPT se alimenta de una amplia variedad de textos que
abarcan diversos temas y géneros. Estos textos incluyen, pero no se limitan a:
1. Libros: ChatGPT se entrena con una gran cantidad de
libros de ficción y no ficción, abarcando géneros literarios como novelas,
ensayos, biografías, obras de teatro, entre otros.
2. Artículos de noticias: Utiliza información de noticias y
artículos de periódicos y revistas en múltiples idiomas y de diversas fuentes
para mantenerse actualizado sobre eventos y acontecimientos.
3. Páginas web: Accede a contenido disponible públicamente
en la web, como artículos de enciclopedias en línea, blogs y páginas
informativas.
4. Foros y comunidades en línea: Examina conversaciones y
debates de comunidades en línea para comprender patrones de lenguaje y
respuestas comunes.
Es importante tener en cuenta que ChatGPT no tiene acceso
directo a internet y no puede recuperar información en tiempo real. Su
conocimiento se basa en los textos presentes en su conjunto de entrenamiento,
que se cierra en septiembre de 2021.
Aunque en el aspecto literario considero que es un gran fabulador y
muy aceptable narrador, si deseamos utilizarlo para documentar no
ficción; debemos andar con pies de plomo.
-Es necesario dar todos los datos posibles sobre los hechos a investigar.
-Recordar
que es una IA debil y no goza de ningún tipo de conciencia y recuerdo
(Reconoce que no aprende nada nuevo en las interacciones con los
usuarios). Es posible que hoy te realice un informe aceptable sobre una
obra y mañana te diga que desconoce ese libro.
-Pasar todo lo que nos diga por la caja de arena (contrastarlo en otras fuentes).
No
sé si tiene picos de actividad y la red neuronal descarta
posibilidades, si el cálculo del coste tokens/céntimos de euro por
consulta le obliga a recortar gastos en su versión gratuita o si realmente tiene una
personalidad inconsciente tan imaginativa que lo que no sabe,
directamente se lo inventa y como lo que dice suele sonar bien, si
cuela...
Los deslices más clamorosos los detecté en un estudio sobre casos criminales.
Se
inventó directamente un caso criminal, con un posible asesino en serie
de otro país y una famosa víctima de otro crimen (lo que hizo que toda
la historia me chirriase).
Al apretarle las
tuercas, se disculpó n veces y supo informar correctamente sobre uno de
los casos. Con el otro no conseguimos aterrizar; aunque mis búsquedas en
Internet me descubrieron un espeluznante crimen,en pleno foro
madrileño, que desconocía.
Consultando otro tema sobre bandas criminales internacionales, identificó a un asesinado presidente de Serbia como narcotraficante !!!
Resulta asimismo paradigmático que
la mayoría de libros publicados sobre ChatGPT no superen las 150
páginas. Preguntado por ello, adorna la situación aludiendo a que los
libros técnicos no deben ser necesariamente extensos, la cantidad no es
sinónimo de calidad, bla, bla, bla.
Resumen:
ChatGPT puede resultar de gran ayuda en muchos campos y su
"personalidad" expansiva, charlatana y demagógica lo hacen un compañero de conversación
ideal, sobre todo en sus momentos más etílicos.
Para
profundizar en sus sesgos de género, las bolas que mete en una supuesta
entrevista de trabajo para Chema Alonso y sus capacidades más
inventivas y lisérgicas, resulta imprescindible darse una vuelta por el
blog amigo elladodelmal.com.
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